Zen- Chan- Enseñanza de la Tierra Pura- "Vagabundear en los ensueños" del Maestro Han Shan

Traducido por el Maestro del Dharma Lok

Aquellos que se dedican a la [práctica dual] de la recitación de Buda y el zen deben tomar el nombre de Amitabha Buddha como un hua-t'ou [o kung-an]. Durante la recitación

 del Nombre de Buda, debes preguntar "¿quién es el que recita el nombre del Buda?" Si preguntas e investigas una y otra vez, llegará un momento en que todos los pensamientos falsos cesaran de repente. No pueden surgir tales pensamientos, o si lo hacen, serán rápidamente suprimido. Tendrás un solo pensamiento claro, como un sol brillante en el cielo, y nunca engendraras ningún pensamiento falso. La mente confusa no reinará más.

Más bien, experimentarás quietud y conciencia plena. El gran maestro Yung-Chia dijo: Estar quieto y alerta es correcto, mientras que estar quieto e inconsciente de lo que está pasando a tu alrededor está mal. Estar alerta y quieto es correcto, mientras que estar alerta pero lleno de pensamientos perturbadores está mal. Si la quietud nos conduce a la falta de atención plena y la conciencia nos conduce a un pensamiento confuso, entonces la conciencia y la quietud fluirán juntos. Dejas ir, tanto como "hundirse" como "flotar" hasta que el pensamiento no surge en la mente, no del pasado, presente o futuro; entonces, de repente el tono, la negrura se agrieta y ves tu Rostro Original. El cuerpo, la mente y el mundo son inmediatamente en paz, como flores ilusorias que caen del cielo. Todo en las Diez direcciones es brillante porque una gran luz brilla en todas partes. Cuando usted llega a esta etapa, este brillo completo siempre está presente en su vida diaria y ya no tendrás ninguna duda. Creerás en tu propia mente, que es intrínsecamente así. Entonces tu mente no es diferente de la de los Budas y Patriarcas ”. Cuando alcances este nivel, ya no te aferrarás al Vacío. Si te aferras al Vacío, caerás en visiones malvadas y heterodoxas. Tu tampoco captas la Existencia o lo Maravilloso. Si te aferras a la Existencia, también caerás en malos caminos.

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Si durante la práctica, encuentras algún reino, ya sea saludable o maligno, apareciendo en tu mente, no debes aferrarte a ella, simplemente dejarla ser. Entonces el reino desaparecerá. No debes temer a los reinos del mal ni deleitarte en los reinos auspiciosos cuando aparecen, porque esta es la acción de los demonios. Si surge la preocupación o la alegría, estos son las sombras de demonios. Debes entender que estos reinos provienen de tu propio mente y no desde fuera. Debes entender que nuestras mentes son intrínsecamente limpias y puras, sin un solo dharma, ni confundido ni despierto. Nosotros no pertenecemos ni a este mundo ni al reino de lo sagrado, ni a ningún otro reino.

Pero, debido a que actualmente estamos confundidos, debemos cultivarnos para reducir la ignorancia y los malos hábitos. Si alguien pudiera abrir su propia mente - vería que es originalmente brillante, omnipresente, limpia y pura - esa sería la Maravillosa Talidad y allí no sería necesario practicar. Sin embargo, debido a que los cultivadores de hoy aún no visto su Auto-Naturaleza (Mente), deben practicar diligentemente para alcanzar la etapa donde pueden terminar el ciclo de Nacimiento y Muerte.

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Buda Shakyamuni enseñó el Dharma de la mente. Hay innumerables métodos de Dharma, pero todos tienen el propósito de despertar la mente. Algunos Patriarcas han establecido un método importante de Zen, pero Buda, el mismo Shakyamuni enseñó a los Bodhisattvas de las Tres posiciones dignas y las Diez Etapas [es decir, todos los Bodhisattvas] el método crucial de la Recitación de Buda para alcanzar la Budeidad. En resumen, practica la recitación de Buda para convertirte en un Buda.

Los Bodhisattvas de las Diez Etapas ya han alcanzado el nivel Verdadero. ¿Puedes decir que no se despiertan? Sin embargo, incluso ellos nunca pueden partir de la Atención Plena de los Budas, el Dharma y la Sangha. (Conciencia de los Budas = Recitación de Buda;). [En el Avatamsaka Sutra,] el joven Sudhana visito cincuenta y tres buenos consejeros espirituales. El primero fue el monje Nube de Virtud, quien le enseñó el método de liberación de la recitación de Buda. El último que él visito fue el Bodhisattva Samantabhadra, quien le enseñó que para alcanzar la  Maravillosa Iluminación, solo necesitas volverte hacia la Tierra Pura Occidental, contemplando al Tathagata de la Luz Infinita (Buda Amitabha) y recibe una predicción de la Iluminación. Toma nota de esto: incluso la enseñanza suprema del Sutra Avatamsaka, que abarca todo el reino del Dharma, también promueve a la recitación del nombre del Buda. 

Los Bodhisattvas de las Diez Etapas, incluso aquellos que ya han alcanzado lo Verdadero, todavía practican la atención plena de los Budas (recitación del nombre del Buda).

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Hay quienes en esta Era del Fin del Dharma se atreven a despreciar a la recitación del nombre de Buda. Ven la recitación como una práctica inferior. Pero, ¿por qué deberían pensar que el Zen y la Tierra Pura es diferente? Estas personas carecen de conocimiento y no comprenden la intención de los Budas. Están creando una falsa dicótoma. Según la Chan y la Tierra Pura, "si la mente es pura, la tierra es pura". Por lo tanto, si eres un Zen principiante y aún no has despertado, a menos que te dediques a la recitación del nombre de Buda, no tienes forma de purificar tu mente. Pero una mente pura es precisamente una mente despierta. Incluso los Bodhisattvas que ya están despiertos todavía practican la Recitación del nombre de Buda, porque sin la recitación del nombre de Buda (atención plena al los Budas) no pueden alcanzar la Iluminación correcta. Sabemos que los Patriarcas despertaron sus mentes a través de la atención plena en los Budas. Cualquiera que practique la recitación del nombre de Buda de manera resuelta y sin distracciones encontrará que todos las aflicciones se desvanecen. Con sus mentes tan brillantes, se les llama despiertos. Mirar de esta manera: la recitación de Buda, es Zen. Ningún Bodhisattva abandona la atención plena de la recitación del Nombre del Budas después de despertar.

Ninguno de los Patriarcas abandonó la practica de la Tierra Pura tampoco. Por lo tanto, la recitación del nombre de Buda es Zen, el Zen es la recitación del nombre del Buda. Desde la antigüedad, esta cuestión ha quedado sin resolver; Quiero hablar ahora y romper el ver que la Tierra Pura y Zen son diferentes. Si todos los Budas aparecieran en el mundo, dirían lo mismo: abandonar este Dharma de la Tierra Pura y abrazar las palabras falsas es obra de demonios y no del verdadero Dharma.

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